viernes, 22 de enero de 2016

Aumenta el misterio de la estrella cubierta posiblemente por megaestructuras artificiales

¿Se acuerda usted del caso de una estrella que tenía de cabeza a los astrónomos porque no sabían la razón por la cual había perdido un 20% de su luz? (Ver nota acá). En aquel entonces, octubre del año pasado, se debatía si los culpables eran un grupo de cometas o bien eran los extraterrestres que habían construido megaestructuras artificiales que aspiraban su energía. Pues bien, hace pocos días surgieron ciertos antecedentes que vuelven este enigma aún más desconcertante…


Gracias al telescopio espacial Kepler, los científicos habían podido analizar la luz emitida por la estrella KIC 8462852, ubicada a 1500 años luz de la Tierra. Los datos resultantes, dados a conocer en octubre de 2015, indicaron que algo obstaculizaba parte de su luminosidad. Al principio, los expertos pensaron que el oscurecimiento podría estar causado por fragmentos de cometa, que realizarían una órbita muy elíptica alrededor de la estrella e interceptarían parte de su luz.



Sin embargo, un nuevo análisis de las observaciones ha revelado que el brillo del mencionado cuerpo celeste se ha ido desvaneciendo poco a poco a lo largo de un siglo, bastante rápido para ser un objeto de gran masa.

Bradley Schaefer, de la Universidad Estatal de Luisiana (Estados Unidos), luego de estudiar los datos de KIC 8462852 y contrastarlos con los análisis hechos a las placas fotográficas del cielo del siglo XIX, ha llegado a la conclusión de que la estrella disminuyó en un 20% su tamaño entre 1890 y 1989.

En tanto, Jason Wright, astrónomo de la Universidad Estatal de Pensilvania (EE.UU.) y quien propuso la tesis de las “megaestructuras alienígenas”, aseveró: "No sé cómo afecta el oscurecimiento a la hipótesis de la megaestructura, pero parece excluir un montón de explicaciones naturales, incluida la de los cometas".

La tesis de los cometas choca con los nuevos datos analizados.


De esta forma, la idea de que fueron unos cometas los culpables de haberle quitado luz a la estrella, pierde peso, pues no explica cómo se ha producido una dramática disminución de su tamaño en sólo cien años y se suponía que su paso era transitorio, que luego de ello la intensidad del brillo volvería a la normalidad.

Tal vez aquellas megaestructuras artificiales, de las que habla Jason Wright, han ido consumiendo a KIC 8462852 en forma vertiginosa, aunque quizás pueda tratarse de un muy extraño fenómeno natural aún no descubierto por la ciencia actual de nuestro pequeño planeta… De momento, lo único que no disminuye es el misterio.


N de la R: Nota publicada en primera instancia en la Guioteca.com, donde soy el guía del canal "Ovnis".

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